miércoles, 30 de junio de 2010
CÓMO LLEGAR A LA PAZ INTERIOR Y A LA ARMONÍA.
De la página www.elalmanaque.com
¿Cómo se consigue la armonía y paz interior?
¿Cómo se consigue la armonía y paz interior? A través del conflicto.
Imagina un paraíso donde puedas ir después de esta vida. Quizás imagines un lugar donde habrá todo tipo de alimentos, felicidad, tranquilidad, serenidad. Donde no haya sufrimientos ni preocupaciones de vivienda o salud. Un sitio en que se realice en el acto todo lo que deseamos. Esto parece ser el cielo. Sin embargo, a las pocas semanas no encontrarías qué hacer, no sentirías ningún estímulo al no tener ningún desafío que superar ni algún obstáculo que vencer.
Ese paraíso es en realidad un infierno. Lo que nos hace vivir, crecer y madurar es nuestra capacidad de enfrentar problemas y solucionarlos. Son los obstáculos los que nos permiten aprender y evolucionar. Las dificultades nos han permitido ser humanos, desarrollar nuestra inteligencia y creatividad.
Desear una vida sin problemas, es desear una muerte en vida. Son los conflictos los que te harán superarte, aprender y construir, día a día, una existencia mejor. La armonía es ese equilibrio dinámico entre el problema y tu disposición a solucionarlo.
No nacemos perfectos
Es posible que durante el día hayas cometido algunos errores. Que no todo haya resultado tan bien como hubieras querido. Quizás no supiste expresarte bien en alguna situación o tus emociones te traicionaron en tu relación con una persona.
Es natural que así suceda pues no nacemos perfectos. Sin embargo, eres perfectible. Puedes mejorar cada día un poco más. Aquí te explico un método infalible para lograrlo.
En la noche, cuando tengas unos minutos de calma y aislamiento, revisa tus acciones del día. Recuerda aquellas situaciones en las que te gustaría mejorar tu comportamiento, tus palabras, emociones, actitud corporal, sentimientos, etc.
Ahora, imagínate actuando de manera perfecta. Visualízate comportándote como una persona exitosa, amorosa, feliz, positiva, constructiva y solidaria. En tu imaginación, te expresas con las palabras precisas, tus sentimientos son muy positivos y haces lo correcto.
Estas imágenes se irán grabando en tu poderosa mente interior y cuando te encuentres en situaciones semejantes en el futuro, comenzarás a comportarte conforme a esas imágenes. Así, cada día, tu relación en el mundo será mejor consiguiendo más armonía en tu vida.
En una discusión nadie gana realmente.
A veces hay personas que son más conflictivas. Quizá tengas a alguien cercano que constantemente te está buscando pelea o controversia. Muchas veces esto ocurre precisamente con las personas más queridas y familiares. Sí, porque ellas han aprendido lo que te molesta. Saben lo que te hace enfadar.
El problema está en que tú reaccionas siempre de la misma manera. Respondes, te defiendes, atacas y quizás hasta lloras.
La solución está en no responder más de la misma manera. Cambia el tema de conversación como si no hubieras escuchado nunca aquello que te ofende. O si es necesario, retírate. En una discusión nadie gana realmente.
Cambia el juego y la otra persona terminará cansándose de insistir al darse cuenta que ya no te hace reaccionar. Se acaba la diversión para ella y dejará de molestarte. Tendrás de esta forma, más armonía en tu vida.
Personas conflictivas alrededor
¿Cómo mantener armonía si hay personas conflictivas alrededor? Muchos aprenden a estar en paz consigo mismo, pero en cuanto se encuentran con ciertas personas se desequilibran. Y estas personas a veces están en el mismo lugar de trabajo diario o en el mismo hogar.
Precisamente por la cercanía, las personas que habitualmente están contigo saben dónde pueden herirte y saben cómo desequilibrarte. Y habitualmente tú responderás, por reflejo condicionado, de la misma manera que ellos esperan, consciente o inconscientemente. Es un juego psicológico en que cada uno repite las mismas movidas.
Para mantener tu equilibrio es necesario que no reacciones de la misma manera. Cambia el juego. Responde de manera diferente o no responde, por mucho que sientas el impulso a hacerlo.
Mantén una actitud mental positiva el mayor tiempo posible. Tolera y comprende. Busca otros temas de conversación. Evita discutir. Cede en lo que no es importante y defiende lo verdaderamente trascendente.
¿Te acordarás en cinco años más del motivo por el cual hoy te enfadas? Si en un tiempo más ni siquiera lo recordarás, no vale la pena que te provoques una enfermedad enojándote o regañando.
Nuestra existencia transcurre en conflictos constantes.
¿Puedes imaginar una vida llena de armonía y paz? Si lo haces, descubrirás que sería... ¡un infierno! Sería intolerable pasarse los días, meses y años de la vida en una quietud donde nada desequilibrante ocurriera.
Nuestra existencia transcurre en conflictos constantes. Siempre hay obstáculos a lo que quieras hacer. Incluso en algún momento te adaptas a una situación para descubrir en seguida que se han producido cambios. Es que la vida entera es cambio. Nada permanece quieto.
Puedes imaginar algo quieto. Quizás un vaso con agua. Sin embargo, en él vibran miles de moléculas estrellándose contra las paredes, colisionando entre sí, saliendo a la atmósfera mientras otras vienen de ella y penetran el agua. Nos parece quieto porque hay un equilibrio entre las moléculas que se mueven a uno y otro lado, entre las que entran y las que salen.
Tu vida será más feliz, exitosa y productiva si aceptas los cambios de la vida. Mejor aún si eres tú mismo quien los provocas. No huyas de los conflictos, sino que aprende a resolverlos. La armonía se conquista a través de los conflictos, consiguiendo el equilibrio de los opuestos.
Acomodarte a los cambios.
La armonía en la vida se logra según la capacidad que tengas para acomodarte a los cambios. Es posible que hoy te encuentres muy bien en tu hogar y trabajo. Pero ya mañana el mundo cambiará. La sociedad actual evoluciona a una velocidad muy grande. ¿Estarás cómodo este próximo año si permaneces con la misma actitud, los mismos conocimientos y los mismos hábitos? No, no lo estarás. Necesitas un constante adaptarte a las nuevas circunstancias.
Es conveniente que tomes el comando de tu vida. Que seas un agente de los cambios y que pienses hacia el futuro, previendo lo que pueda suceder.
Una forma excelente para tener una actitud apropiada y mejorar tus condiciones de vida es precisamente... mejorar.
Cada día hazte las siguientes preguntas y tendrás una vida de más realizaciones, satisfacciones y prosperidad:
¿Qué puedo mejorar en mí?
¿Cómo puedo mejorar mis relaciones con los demás?
¿Qué puedo mejorar de mis hábitos y manera de hacer las cosas?
Evitar disgustos
Muchas personas viven en un disgusto casi permanente, pudiendo evitarlo. Quizás tú te encuentres en esa situación.
Seguramente hay comportamientos que te molestan de las otras personas. Quizás te moleste algo que dijo o hizo, o no dijo o no hizo una persona cercana. Si no le comunicas lo que te perturba, el otro no tendrá ninguna oportunidad de modificar su conducta. Hay muchas personas que acumulan estas molestias por días, meses y años. Y un día ya no lo puede soportar, rompiendo una relación. Si se analizan las causas, se descubrirá que los motivos no son tan importantes, pero se sumaron a través del tiempo.
Es mejor que trates de aclarar y solucionar las situaciones a tiempo, antes que crezcan y se acumulen. En la mayoría de los casos, si la otra persona te aprecia, buscará una manera diferente de proceder. Muchas agradecerán sinceramente que se lo hayan dicho, pues su intención no era provocarte un daño o un enojo.
¿Y si la otra persona no cambia de actitud o no le importa seguir molestando? Entonces, es mejor que evites esas situaciones, no te comuniques con determinados temas o evites el contacto con esa persona en las circunstancias que te molestan. No vale la pena que te arruines el día.
Me considero digno de respeto
Puedes llevar toda una vida de desarmonía debido a tu pasado. Si en tus años de niñez y juventud recibiste muchos mensajes perturbadores, negativos o que hayan menoscabado a tu ego, es probable que no te sientas plenamente feliz.
Hay personas que si bien tienen lo necesario en la vida, no se sienten seguras, realizadas y plenas. Debes tener la absoluta certeza que tú y todas las personas pueden y tienen el derecho de sentirse plenas, felices y apreciadas.
Tu mente subconsciente ha acumulado gran cantidad de mensajes en forma desordenada, siendo muchos de ellos francamente perturbadores. Es como tirar deshechos y basura a un sótano o a un desván. De vez en cuando conviene hacer una limpieza.
Obrarás cambios asombrosos en tu vida si dejas un tiempo cada día, durante dos semanas, para anotar todos los mensajes perturbadores que puedas ir recordando. Pon atención a aquéllos que bajan tu autoestima: "no eres capaz", "siempre te equivocas", "no sirves para...", "qué voy a hacer contigo", etc.
Luego, todos los días, frente a un espejo, párate con desplante, seguridad y alegría. Y declara mentalmente o en voz alta lo siguiente. "A pesar de mis limitaciones, me considero digno de respeto. Soy un ser único en el Universo, con mis cualidades y mis defectos. Los defectos son producto de inseguridades que alguna vez adquirí, pero ahora decido eliminar de mi mente lo negativo. Así, cada día tengo más seguridad y confianza en mí."
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