Diferencias entre separación y divorcio
Revisado y aprobado por el psicólogo Sergio De Dios González.
Escrito por Pedro González Núñez
Última actualización: 25 junio, 2020
Puede parecer lo mismo, pero no lo es. O sea, las diferencias entre separación y divorcio existen legalmente, hecho que puede afectar personalmente a cada integrante de una relación y también a una familia, pues también los hijos sufren las consecuencias.
Cuando se opta por el cese de la convivencia entre dos cónyuges, es importante saber a qué se atienen. El primer paso suele ser la separación, el segundo, el divorcio, que es mucho más definitivo.
Cuáles son las diferencias entre separación y divorcio y separación de hecho
Veamos en qué consiste cada fórmula. Por un lado tenemos la separación, que implica un cese efectivo de convivencia entre cónyuges. Sin embargo, no es definitivo ni tiene efectos legales hasta que no se pasa por una declaración a través de sentencia judicial.
Existe otra figura, conocida como separación de hecho, pero que no tiene efecto legal sobre terceros. Es decir, ambos cónyuges deciden poner fin a su relación cesando la convivencia, pero no acaba con el matrimonio. Por último, el divorcio sí que tiene efecto legal a terceros y disuelve totalmente el matrimonio. Aquí si habrá sentencia judicial, pues es una fórmula definitiva de cesar con la convivencia.
2 similitudes y 3 diferencias entre separación y divorcio
Encontramos, en realidad, tres diferencias entre separación y divorcio que, legalmente, son las que se han de tener en cuenta. Así pues, si estás pensando en cesar tu relación legal, sería bueno considerarlas:
- Mientras la separación no disuelve el vínculo matrimonial, el divorcio sí lo hace de forma definitiva a través de sentencia judicial.
- Un divorcio implica la disolución del régimen económico en el matrimonio. La separación únicamente lo hace desde la sentencia.
- Tras la separación, los cónyuges no pueden volver a contraer matrimonio, ni entre sí ni con otras personas, solo tras el divorcio.
Ahora bien, en ciertos aspectos, sí que se asemejan ambas fórmulas legales. Son estos que vemos a continuación:
- Da igual si hay separación legal o divorcio, a no ser que haya un testamento que lo especifique, se pierde el derecho legítimo a la herencia.
- Una vez existe sentencia firme de separación o divorcio, se establecen las medidas al respecto de cuidado, guarda y custodia de los hijos, régimen de visitas, etc. También incluye gasto de mantenimiento de los niños, patria potestad, disolución del régimen económico matrimonial, uso de la o las viviendas, etc.
Diferencias psicológicas entre divorcio y separación
Curiosamente, la separación suele ser más dura que el divorcio. Por lo general, antes de llegar a una situación de divorcio, precede la separación. Sin embargo, el matrimonio todavía no está disuelto hasta que no se llega a la sentencia judicial. Es decir, todavía se puede albergar cierta esperanza de retomar el matrimonio y reconducir la relación.
Es decir, el primer paso y más duro puede ser la separación. Sin embargo, una vez llega el divorcio, es probable que ambos cónyuges hayan rehecho su vida, por lo que la situación no será tan traumática. De hecho, puede considerarse incluso una experiencia liberadora. También es posible que uno de los cónyuges albergase esperanzas de retornar y considera la disolución definitiva del matrimonio como la prueba final de que la relación se ha roto definitivamente. Puede ser un momento duro para uno de los dos en este caso.
La separación o divorcio
Sea como fuere, ambas situaciones son difíciles. En estos casos, tanto en uno como en otro, se pueden presentar ciertas características que se asemejan al proceso de duelo real:
- Sentimiento de pérdida, de expectativas e ideales.
- Sentir que se ha fracasado, hecho que puede generar culpa.
- Sufrimiento por los hijos y miedo a los cambios que se avienen.
- Situaciones de baja autoestima, cuestionamiento personal y evaluación del pasado.
- Se puede caer en depresión, pues no es sencillo acabar una relación en la que se ha compartido mucho durante varios años.
- La ansiedad también es común. Pueden aparecer capítulos de insomnio asociados.
- Incluso pueden presentarse casos con trastorno de estrés postraumático, especialmente si ha habido violencia de género por medio.
- Además, podría ser que uno de los cónyuges muestre síntomas de inadaptación y tendencia al aislamiento.
No cabe duda de que no es una situación agradable para nadie. Pero por más difícil que sea, hemos de intentar racionalizar y reconducir nuestra vida tras una separación o divorcio, especialmente si hay niños en común.
“Las relaciones terminan, pero no terminan con tu vida”.
-Steve Martin-
Fuente: https://lamenteesmaravillosa.com/diferencias-entre-separacion-y-divorcio/
Cómo reducir el impacto del divorcio en los hijos
Escrito y verificado por la psicóloga Alicia Yagüe Fernández.
Última actualización: 26 septiembre, 2019
- Reducir el impacto del divorcio en los más pequeños es quizás la medida más importante a adoptar cuando enfrentamos un proceso de estas características. Así, las medidas preventivas dependerán, en buena medida, de la edad del los hijos.
Cuando se produce una ruptura de pareja, pueden salir a la luz muchas emociones, como ira, miedo, decepción o rencor. Así, los progenitores que se mantienen constantemente en “zona de guerra”, es decir, en discusiones, disputas y pleitos, convierten a sus hijos en víctimas directas. Como padres debemos protegerles, reducir el impacto del divorcio en los menores. Pensemos, ¿cuáles son las consecuencias si colocamos a los niños en medio? Sí, probablemente las balas les acaben hiriendo.
En muchas ocasiones, la ruptura de pareja, y por lo tanto de la estructura familiar, supone un conflicto. Cualquier conflicto contiene tanto una posibilidad como un peligro. Si bien el cambio no es necesariamente positivo, aparece la posibilidad de resolver la situación de forma constructiva.
Todo dependerá de la forma en que afrontemos dicha crisis vital y el modo en que ordenemos nuestras prioridades. Cuando los intereses económicos o las venganzas sentimentales toman la palabra, el sufrimiento de todos los miembros se convierte en el protagonista. Para evitarlo, el afecto y las necesidades de los hijos deben mantener un peso importante en la ecuación de decisiones.
“Un padre no es el que da la vida, eso sería demasiado fácil, un padre es el que da el amor”.
-Denis Lord-
Impacto del divorcio: reacciones emocionales de los hijos según su edad
Es importante conocer las reacciones emocionales de los menores según su momento evolutivo, ya que esto nos permitirá entender su conducta y ayudarles en el afrontamiento del conflicto.
Si el menor se encuentra en edad temprana, niños hasta los 6 años, su memoria principalmente es de carácter emocional. Presentan una baja comprensión del porqué complejo de determinados acontecimientos, lo que en ocasiones supone que hagan atribuciones erróneas. Así, pueden llegar a sentirse culpables del divorcio.
Por ejemplo, si el niño se ha portado mal en casa y le han reñido, puede asumir que sus padres se han divorciado porque él se ha portado mal. En este sentido, y debido al déficit en el manejo de sus emociones, crean interpretaciones erróneas. Los niños fantasean con la reconciliación de sus padres, desarrollan historias en su imaginación para dar sentido a lo que les rodea, presentan miedos propios de la edad y hacen muchas preguntas.
Organizar rutinas de vida estables y resolver sus dudas con un lenguaje adaptado ayudarán a que su nivel de preocupación descienda. En el caso de que el pequeño adopte conductas regresivas, no hay que regañarle.
Por ejemplo, si se hace pis en la cama o quiere dormir acompañado, es recomendable promover su autonomía, ayudándole a que exprese el malestar emocional y poniendo límites cuando sea necesario. Hablar de su experiencia ayuda a reducir el impacto del divorcio.
Es fundamental que el niño entienda que siempre tendrá el cariño incondicional de sus padres y que no es el responsable de la separación.
La media infancia, niños de entre 6 y 12 años, es una etapa donde se construye la autoestima y el autorreconocimiento. El grupo de iguales y el ámbito escolar juegan un papel muy relevante para el desarrollo de aprendizajes, pero también son esenciales los mensajes y la educación que reciben por parte de las figuras parentales, ya que los padres son un espejo en el que los menores se miran para construirse a sí mismos.
En estas edades es habitual que se presenten sentimientos de culpa, rechazo o abandono. Poseen mayor capacidad para entender qué es un divorcio, pero suelen persistir las fantasías de reconciliación, por lo que hay que asegurarles que nunca les va a faltar el cariño de sus padres, pero que no van volver a estar juntos como pareja.
Por último, la etapa de la adolescencia es un momento donde tanto el amor como los límites son esenciales. Un adolescente puede comportarse de manera rebelde sin necesidad de que sus padres se estén divorciando. En cambio, si presenta actitudes excesivas o estados anímicos marcadamente desajustados, será importante prestar atención, pues puede deberse a dificultades en la gestión del conflicto familiar.
La adolescencia es una etapa en la que se construye la identidad personal, por lo que los hijos “retan” a los padres y buscan ponerles a prueba. Por este motivo los progenitores deben ofrecer seguridad al joven mediante límites explícitos. Esta también será una forma de reducir el impacto del divorcio.
El adolescente ha de entender que si los padres otorgan libertad es a cambio de que él demuestre responsabilidad, y en función de dicha fórmula se estipularan los acuerdos. Es recomendable, por lo tanto, fomentar la reflexión abstracta y el desarrollo maduro del menor, sin dejar de lado la expresión de afecto.
“¿Qué se siente al ser padre? Es una de las cosas más difíciles que hay, pero a cambio te enseña el significado del amor incondicional”.
-Nicholas Sparks-
Cómo reducir el impacto del divorcio: padres inteligentes
Hablar mal del otro progenitor, usar al niño como mensajero, descargar emociones e insultos en presencia del menor o intentar “castigar” al otro a través de actitudes de crianza, son algunas de las formas con las que podemos dañar seriamente el desarrollo psicológico y afectivo de nuestros hijos.
Un conflicto no puede detenerlo un menor, los responsables de terminar con el sufrimiento son los adultos, es decir, sus padres. Por otro lado, el hecho de que uno de los progenitores actúe de manera errónea no le da al otro derecho a seguir sus pasos.
No podemos controlar las intenciones o conductas de otras personas, pero sí podemos elegir qué clase de madre o padre queremos ser. Por ello, es importante hacer una gestión inteligente del conflicto, anticipando las consecuencias de las medidas que tomamos. En este sentido, hay tres puntos que no podemos olvidar y que nos ayudaran a reducir el impacto del divorcio en nuestros hijos:
I. Interés superior del menor
Como padres, podemos tomar mejores o peores decisiones, tal vez logremos llegar a grandes o pequeños acuerdos con nuestra expareja, pero el mínimo que siempre debe cumplirse es: cubrir las necesidades del menor y alejarle del enfrentamiento.
II. Separar el conflicto de pareja del conflicto de crianza
Dos personas son libres de romper su convivencia en cualquier momento, pero la responsabilidad de ejercer como padres no puede quedar al margen. Es esencial diferenciar las funciones parentales, que deben asumirse a lo largo de la vida, de la relación de pareja que ya ha finalizado.
Las prioridades y necesidades de los menores deben estar cubiertas en primer lugar, y jamás han de relegarse a un segundo plano.
III. Considerar el momento evolutivo de los hijos
La etapa de desarrollo influye directamente en la capacidad de asimilación que los menores tienen a la hora de superar crisis vitales. Necesitan el apoyo y la guía de un adulto que les sirva de modelo para regular sus propias emociones. Los padres son las figuras más importantes para aprender habilidades que permitan afrontar los problemas.
“Mi padre me dio el mayor regalo que cualquier persona podría darle a otra persona: creía en mí”.
-Jim Valvano-
Fuente: https://lamenteesmaravillosa.com/como-reducir-el-impacto-del-divorcio-en-los-hijos/
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